Las mujeres que dan a luz por cesárea suelen acabar con una bolsa de piel sobrante sobre la cicatriz.
Cómo conseguir un vientre plano después de dar a luz
Dado que cada persona cicatriza de forma diferente, es imposible predecir si se desarrollará o no este indeseado bulto y, en caso afirmativo, si desaparecerá de forma natural. Aunque la dieta y el ejercicio pueden ayudar a las mujeres a perder el exceso de grasa después del embarazo, un estilo de vida saludable no puede hacer desaparecer la cicatriz y el bulto dejados por un parto por cesárea. Algunas mujeres pueden experimentar un vientre grande durante años, mientras que otras pueden notar que el abdomen se aplana gradualmente con el tiempo.
Las mujeres que tienen esta bolsa prominente pueden sentirse desanimadas cuando no se reduce, a pesar de una rigurosa rutina de ejercicios. Por desgracia, si el problema no desaparece por sí solo, la cirugía suele ser la única solución eficaz.
Como no hay dos barrigas posparto iguales, es necesario un enfoque individualizado de esta cuestión. Podemos dividir estos bultos de la cesárea en tres categorías según su anatomía y características tisulares, lo que nos permitirá recomendar los tratamientos adecuados para perder grasa abdominal tras una cesárea. Estas categorías son: exceso de grasa con piel flácida (la más común), exceso de grasa con buen tono de piel y piel flácida sola (la menos común).
Exceso de grasa con piel flácida
Este es el escenario más común. Es muy frecuente tener dificultades para perder todo el peso ganado durante el embarazo, y es muy común que aparezca un depósito de grasa persistente que cuelga sobre la cicatriz de la cesárea. Además, el embarazo suele estirar la piel del abdomen más allá de su capacidad.
Dado que este tipo de abultamiento implica problemas tanto en la piel como en las capas de grasa, nuestro tratamiento debe abordar ambas capas. Liposucción conservadora (a menudo con anestesia local) en la que se aspira cuidadosamente la grasa de la zona a través de incisiones más pequeñas para recuperar un contorno abdominal más definido y plano.
Para las personas con laxitud cutánea de leve a moderada, BodyTite es un potente suplemento que tensa eficazmente la piel flácida con energía de radiofrecuencia (RF). Se trata básicamente de una forma de tensar la piel abdominal sin cicatriz de abdominoplastia. En su lugar, se utilizan las mismas incisiones diminutas que para la liposucción para insertar la varita de RF, que transmite la energía a través de la piel hasta un receptor situado en la superficie cutánea. Esto calienta la piel, contrae las moléculas de colágeno y hace que la piel se contraiga. El resultado final es una eliminación drástica del exceso de bolsa. Para las personas con piel muy flácida, la abdominoplastia suele ser la mejor solución. La abdominoplastia no sólo ayuda a eliminar el exceso de piel y grasa, sino que también tensa los músculos abdominales para conseguir un vientre más estético.
Grasa extra con buen tono de piel
Las personas con este tipo de problema pueden muy bien recurrir únicamente a la liposucción. Una vez que se ha eliminado la grasa mediante succión (de nuevo, a menudo sólo con anestesia local), la piel puede contraerse por sí sola, de modo que no queda exceso de piel en la cicatriz de la cesárea.
Piel flácida sola
Se trata de una situación bastante inusual que puede producirse cuando una persona ha ganado peso durante el embarazo, ha perdido el exceso de grasa en la zona abdominal, pero su piel no es lo suficientemente elástica como para contraerse por completo. A menudo se ve como un montón de piel colgando sobre la cicatriz de la cesárea. Para la laxitud cutánea de leve a moderada, el BodyTite es de nuevo una muy buena opción. En caso de laxitud cutánea grave, el exceso de piel puede eliminarse mediante una abdominoplastia (cirugía abdominal).
A partir de lo anterior, podemos afirmar que las bolsas no deseadas (de grasa y/o piel) son extremadamente frecuentes en las mujeres que han tenido una cesárea y pueden tratarse de forma muy eficaz, normalmente con un tiempo de inactividad mínimo. La clave para garantizar el mejor resultado es elegir un cirujano estético experimentado y cualificado que pueda recomendar un plan de tratamiento personalizado y adecuado.